Gente rota: historias que nunca verán la luz.

Siempre quise escribir un libro titulado “Gente rota”, pero nunca he podido sentarme a hilar las historias porque hay historias que han de morir sin ser contadas, que son parte de los susurros a media luz y sólo pertenecen ahí, a la penumbra de ese momento intimo y solemne de secretos compartidos.

Somos mucha la gente rota que vaga por la vida agarrándose los trozos que se le van cayendo de cualquier manera, para no quedar esparcidos y perdidos entre la gente común o menos rota. Somos gente ya quebrada, frágil, que en una multitud no se nos reconocería porque hemos aprendido a dar el pego, a pasar desapercibidos, a caminar con sigilo entre vosotros, los menos rotos.

Un día nos romperemos del todo y caeremos hechos mil pedazos, quizá antes que los demás. Pocos se enterarán de que ya estábamos rotos hacía tiempo y que para nosotros no había ni cura ni pegamento.

Cada uno de los personajes rotos, tiene algo en común: un corazón roto desde la niñez. Nadie sabe exactamente qué precipitó su rotura, sólo que le ha tocado vivir escondiéndose y alejándose de lo que más daño le cause.

La gente rota sobrevive pero nunca supera su rotura, vive con ella lo mejor que puede. Esta gente se cansa a veces de vivir con tanta fragilidad y piensa que para qué y se nos van a veces con un “lo siento”… Y todo lo demás…

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s